Málaga
La capital de la provincia de Málaga es la ciudad costera más poblada al sur de España.
Su territorio se extiende desde el centro de una bahía rodeada de sistemas montañosos.
La fundación de este municipio se remonta a la Antiguedad y aún conserva numerosos restos arqueológicos de su pasado. Desde mediados del siglo XX Málaga es protagonista del boom turístico y son numerosos los visitantes que llegan cada año para disfrutar sus vacaciones en esta localidad. En Málaga puedes disfrutar de una gran oferta en actividades culturales, deportivas y de ocio. Además, en su litoral puedes encontrar playas arenosas y un puerto con importante tráfico de mercancías y viajeros.
Plagas en Málaga: cucarachas y roedores
Las cucarachas y los roedores son plagas urbanas que sufren todos los municipios y Málaga no se libra de ellas. Para combatirlas, el Ayuntamiento de Málaga utiliza su Servicio de Vigilancia Sanitario-Ambiental que realiza actuaciones preventivas durante todo el año en la vía pública, edificios municipales y colegios públicos. Además, realizan un seguimiento de los resultados de los tratamientos por si es necesaria una nueva intervención.
Los servicios municipales no realizan tratamientos en viviendas o zonas de propiedad privada, por lo que en el caso de encontrar roedores o cucarachas en tu edificio es recomendable acudir a un especialista en control de plagas para que solucione el problema.
Plagas en Málaga: procesionaria del pino
Con la llegada del buen tiempo también comienza el viaje de la procesionaria del pino, una pequeña oruga que baja de las copas de los árboles hasta el suelo. Este insecto es muy común en Málaga y, aunque no es agresivo, puede provocar graves casos de alergía en personas y mascotas. El Ayuntamiento de Málaga realiza tratamientos preventivos para controlar la población de procesionaria del pino en el municipio antes de que se conviertan en una plaga peligrosa.
Plagas en Málaga: legionella
La legionella es una bacteria que podemos encontrar en lugares relacionados con el agua y que puede provocar la peligrosa fiebre del legionario, una enfermedad respiratoria grave. Para prevenir la legionella, el procedimiento más eficaz es mantener una correcta higiene y desinfección en las instalaciones de agua que se consideran de riesgo. Estos trabajos de limpieza y desinfección deben llevarse a cabo por empresas homologadas y profesionales cualificados para trabajar con los materiales de desinfección adecuados para acabar con la legionella.
